Chilpancingo, Guerrero. 23 de abril de 2010.
· Exhorta nuevamente la Red Guerrerense a las autoridades a solucionar el conflicto por el agua, el voto de confianza de los pueblos es una muestra de su disposición y buena voluntad.
· Critica que los poderes fácticos en Guerrero hayan superado al Estado, quien no puede o no quiere hacer valer su investidura de autoridad.
· Resalta que ninguna instancia oficial ha podido hacer que la ley se cumpla, Tecoanapa no es el único caso donde los caciques mandan.
Las organizaciones integrantes de la Red Guerrerense de Organismos Civiles de Derechos Humanos AC, como entidades defensoras de derechos humanos, manifestamos nuestra profunda preocupación por el actual conflicto por el agua en Tecoanapa, ya que no hay ninguna instancia oficial que de cumplimiento verdadero y conforme a derecho tanto a la recomendación de la CODDEHUM, como al reciente exhorto que realizó el Congreso estatal, en el sentido de concluir la obra que fue programada y presupuestada desde marzo de 2007, lo anterior es una muestra de la vigencia de los poderes fácticos que controlan las políticas públicas y económicas en nuestro estado, en perjuicio de los derechos humanos de sus habitantes.
El derecho humano al agua, que les ha sido vulnerado a los habitantes de Mecatepec, Tepintepec, Barrio Nuevo, El Carrizo y El Guayabo, es un derecho fundamental debido a que el agua es un elemento necesario para la supervivencia de cualquier forma de vida en nuestro planeta; los pactos y tratados firmados por el Estado mexicano en materia de derechos humanos, obliga a los gobiernos federal, estatal y municipal a garantizar dicho recurso invirtiendo para ello “la mayor cantidad de recursos disponibles”, según lo estipulan dichos convenios. La oposición del autodenominado “Comité de Agua” a que se concluya la obra y las facultades que los gobiernos le conceden en contra de los derechos de los cinco pueblos, es una clara violación a las legislaciones estatales, nacionales e internacionales, a favor de un grupo de personas que además usurpa funciones del ayuntamiento y actúa impunemente solapadas por la inercia de las relaciones de poder existentes en Guerrero y México.
Como organismos defensores de derechos humanos, hemos monitoreado el desarrollo del conflicto, con el único interés de evitar que las violaciones a los derechos humanos se continúen sucediendo como ha ocurrido en otros casos en donde las movilizaciones sociales son reprimidas y criminalizadas; hemos apoyando a los cinco pueblos en la interlocución con actores políticos que puedan intervenir para solucionar el conflicto, también hemos apoyado en la defensoría y representación jurídica de los procesos que se desprenden del problema por el agua y hemos comprobado que ninguna instancia de gobierno ha podido hacer valer su autoridad y envestidura frente a los cacicazgos que controlan el destino de los pueblos guerrerenses.
El movimiento por la defensa del derecho al agua, que encabezan los cinco pueblos, no es un movimiento político que pretenda respaldar candidaturas o cargos en la administración pública, tampoco es de carácter económico, pues no busca obtener ganancias ni explotar recursos lucrativamente, es un movimiento que defiende un derecho que actualmente se está violando y dicha violación impide a los habitantes de los cinco pueblos no sólo el acceso a mejores condiciones de vida, sino que impiden de manera sistemática la propia vida; es por ello que no entendemos la lentitud e insensibilidad con que actúan las autoridades, marginando aún más a las poblaciones maltratadas históricamente, en lo que pareciera ser una política de exterminio. El voto de confianza que los habitantes de las cinco comunidades le han otorgado extraordinariamente al gobierno estatal, es una muestra de la flexibilidad y disposición de los pueblos en su defensa del derecho al agua, más aún cuando en numerosas ocasiones han sido engañados con la promesa de la conclusión de la obra e incluso nuevas propuestas de acceso al agua, minutas, acuerdos, convenios, todos los cuales han sido incumplidos.
Si todas las instancias oficiales como son la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas, CONAGUA, PROFEPA, SEMARNAT y el propio Congreso estatal, además de organismos autónomos como la CODDEHUM y autoridades locales y estatales, han resuelto que los cinco pueblos tienen razón y que la obra se llevará a cabo, ¿porqué no se realiza? ¿es acaso que el Estado ya fue rebasado por la ilegalidad de los poderes fácticos?, las organizaciones integrantes de la Red Guerrerense de Organismo Civiles de Derechos Humanos AC, nuevamente volvemos a exhortar a las autoridades de los tres niveles de gobierno, pero en especial al gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, a que prioricen en su agenda la solución del conflicto por el agua en Tecoanapa y se concluya la obra lo más pronto posible, garantizando a los cinco pueblos el derecho humano al agua, fundamental para el ejercicio de cualquier otro derecho.
Atentamente
RED GUERRERENSE DE ORGANISMOS CIVILES DE DERECHOS HUMANOS AC
Secretaría Técnica.
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